SALAMANCA II

Volviendo al tema de Salamanca, Piqué condena las pancartas, pero lo hace con la boca pequeña, y recuerda cómo le zarandearon en la manfestación del 12-M. Ciertamente, aquellos hechos fueron condenables pero no se puede entrar en la política del "Y tú más!". Por otra parte, aquella manifestación fue convocada el día después del mayor atentado terrorista cometido en España y después de haber asistido a uno de los intentos de manipulación de la opinión pública más grande que ha acontecido en cualquier país de la UE en las últimas décadas.

Otra reflexión sobre la relación Catalunya-Estado. Se exige a Catalunya que actúe con solidaridad respecto a las demás comunidades autónomas del Estado, aunque varias de ellas experimentan un crecimiento mayor que Catalunya. Muy bien, pero luego no se quiere reconocer este mismo principio de solidaridad en el concierto de la UE, ahora que el PIB español se va a situar por encima de la media con la incorporación de los países del Este y vamos a pasar de ser receptores de fondos a ser contribuidores de esos fondos de cohesión. En esto se ponen mil trabas y se quieren establecer períodos transitorios. Si bien parece difícil que en España se reconozca la contribución a la solidaridad interterritorial de Catalunya, podría ser diferente con Europa y valdría la pena que en los pueblos de la ancha geografía española que en los últimos veinte años han visto que para ir a su capital de provincía podían utilizar una autovía, hicieran un monumento al contribuyente alemán desconocido.